sábado, 4 de enero de 2014

Siempre nos quedará New Orleans. Treme 4x04 - 4x05

TREME - Sunset on Louisianne / ... To miss New Orleans


El último plano, el último suspiro

Cuando termino una serie que me importa de verdad siempre siento un vacío, no un vacío en el estómago, físico. Es un vacío que no se definir muy bien, quizás se podría decir que siento una especie de aflicción. Me pone triste terminar un recorrido que había disfrutarlo, saber que es el final de ese trayecto, que aunque la vuelva a ver ya nunca será lo mismo. La magia de la primera vez. La primera vez que uno va a New Orleans debe ser especial también, se debe sentir una especie de magia en el aire. Treme me ha mitificado la ciudad para siempre. Me he prometido a mí mismo que algún día iré, que recorreré el corazón del jazz, que bailaré y comeré, y beberé… mucho. Y que seré feliz, porque a pesar de todas las fatalidades, la New Orleans que dibuja David Simon en Treme es una ciudad hecha para ser feliz a pesar de estar sumida en un amarguísimo túnel histórico. Siempre he dicho que Treme es una serie dicotómica, el retrato de eso que hay entre los extremos, de la vida. Cuando decimos que es una serie contemplativa, slow tv, en realidad lo que estamos diciendo es que es una precisa aproximación al mundo de la vida, a diferencia del resto de series, aquí no importan las tramas, solo el discurrir vital de unos personajes sumidos en un mundo complicado. ¿Cuál no lo es?

Treme es también una serie circular. Al final muchas veces nuestra vida es un bucle del que no podemos escapar. Como decía Marina Such de El diario de Mr. MacGuffin, el primer capítulo de la serie se llamaba Do you know what it means..., y el último ...To miss New Orleans, formando así el título de esta estremecedora canción que cierra la serie (maravillosa la dirección de esa secuencia de la gran Agnieszka Holland, que también dirigió el piloto de la serie). Por muchas vueltas que des en la vida, al final siempre puedes anclar tu barco en ese puerto al que llamas hogar. Las raíces son importantes. Treme es una apología de la esencia (de las personas, de las cosas, de las ciudades) como fundamento de la vida. Como dice Annie en la season finale, una cosa es ceder para avanzar, otra cosa es acabar cediendo tanto que dejes de ser tú mismo. El difícil equilibrio entre cambiar para sobrevivir (o progresar) y seguir siendo la misma persona es algo que ha sobrevolado siempre esta serie, a esta galería de personajes rica y compleja como pocas.

La última frase de Simon
Me acabo de dar cuenta de que he escrito los dos párrafos anteriores escribiendo en presente, como si Treme no estuviera cerrada, como si no hubiera visto el final, como si no estuviera triste y conmovido. La negación, esa etapa del duelo. Los dos últimos capítulos de la serie también son una reflexión sobre el final de la vida. La muerte se nos muestra en el campo físico como algo natural, sin estridencias, uno simplemente deja de respirar. En cambio, la muerte en el plano sentimental es algo de una complejidad que muchas veces no tenemos en cuenta. Es difícil explicar lo que significa ver una vida desaparecer ante tus ojos, esfumarse. Es sobre todo difícil explicar como la vida sigue aunque una vida se acabe. En la season finale, Simon y Overmyer captaron muy bien esto, ese momento en el que a la negación y el duelo sigue el seguir hacia delante. Avanzar no significa olvidar, porque, repito, el puerto que llamamos hogar siempre seguirá ahí, no podemos (ni debemos) escapar de nosotros mismos, y los que ya no están son parte de nosotros mismos.


Este cierre de Treme es también el párrafo final de un manifiesto sobre el estado actual de América. En estos dos últimos capítulos están presentes todos los temas que David Simon lleva analizando toda su carrera: la corrupción (política, policial, económica), la violencia, el colapso del sistema educativo público, la especulación urbanística, la transformación de la geografía urbana, el periodismo de guerrilla… Todo está en estas dos horas. Y lo más importante es que está colocada de forma indeleble, trenzado al milímetro, escrito con una sutileza que asusta. El talento de Simon para poner el foco en la América que América no quiere enseñarnos siempre me ha dado miedo la verdad. Es un don que acojona. He decidido escribir esto sin espoilers, no es tanto un recap como un adiós, un análisis como un ejercicio de autoayuda. Pero creo que lo que importa está aquí, quizás todo salvo la desoladora hermosura de la música de New Orleans. La música de New Orleans no es como el resto de música, no como la música de Nashville que diría Annie, es una música que sangra. David Simon, vuelve pronto, la televisión te necesita, yo te necesito.

4 comentarios:

  1. Ahora que ha acabado habra que verla. Para cuando una porra sobre los goya?

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    Respuestas
    1. Lo has prometido :)
      jajajaja antes de que los den, a ver si puedo ver más pelis, hay varias que no he visto que me apetecen mucho :)

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    2. jajajaja fue casualidad! xD
      Yo le llamo hacer un Zuckerberg xD
      PD: Gracias por el gif jajaja

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